Henry James Eder Caicedo, el presidente de la junta directiva del ingenio azucarero Manuelita, es uno de los empresarios súper poderosos del campo y del Valle del Cauca.

Eder, un ingeniero eléctrico, es -con su hermano Harold- la cabeza visible de una de las empresas agroindustriales más importantes del país y es el presidente de su junta directiva desde 1998.

Pertenece a la quinta generación de una familia que comenzó en el negocio del azúcar cuando Santiago Eder le compró en 1864 la Hacienda La Manuelita a Jorge Enrique Isaacs, padre del célebre escritor y autor de María. Desde comienzos del siglo XX, ha sido uno de los ingenios más importantes de América Latina.

Actualmente los Eder son -junto con los Caicedo de Riopaila Castilla y el Grupo Ardila Lülle- los más poderosos del sector de la caña, que es a su vez el sector productivo con más peso político en el campo colombiano. Además, en los últimos años han venido incursionando también en cultivos de palma en la Altillanura, con 37 mil hectáreas entre Meta y Casanare destinadas a la inversión en biocombustibles, y el importante ingenio Laredo en Trujillo (Perú).

El poder de lobby de los azucareros ha sido muy efectivo, como lo muestran el TLC con Estados Unidos o la Alianza del Pacífico, en los que lograron proteger el azúcar en los tratados, excluyéndolo del segundo e incluyéndolo en condiciones muy ventajosas para ellos en el primero.

Al frente de ese lobby ha estado Asocaña, donde la voz cantante la llevan los industriales del sector -como los Eder- y no tanto los cultivadores de caña. Este gremio, que dirige Luis Fernando Londoño Capurro, tiene también influencia en la SAC -cuya junta directiva preside-, el Consejo Gremial Nacional y la Andi.

A comienzos de 2014 el Gobierno creó la Misión Rural, un grupo de expertos dirigido por el ex ministro José Antonio Ocampo que trazará una hoja de ruta para las políticas públicas en desarrollo rural en las próximas dos décadas, e invitó a Eder. Entre sus integrantes están los ex ministros Roberto Junguito,  Juan Camilo RestrepoCecilia López Montaño, los economistas Albert Berry y José Leibovich, y los expertos en tierras Alejandro Reyes y Absalón Machado.

Aunque los Eder han estado casi siempre vinculados a la empresa familiar, también han estado bien conectados dentro del mundo político.

Su padre, Harold Henry Eder, fue ministro de Fomento durante la junta militar que siguió a Gustavo Rojas Pinilla y en 1965 fue uno de los primeros secuestrados (y asesinados) por las Farc. (De hecho su hermana Elsa Eder fue, en 1944 y cuando solo tenía 4 años, la primera secuestrada por extorsión de la que se tiene registro en el país). Su hermana Doris Eder de Zambrano fue viceministra de Educación de Alfonso López Michelsen y luego la primera gobernadora mujer del Valle del Cauca y Ministra de Educación, ambas veces designada por Belisario Betancur.

Su hijo Alejandro Eder Garcés, que trabajó como analista de nuevos negocios en Manuelita, es el Alto Comisionado para la Reintegración del gobierno Santos y su otro hijo, Harold Eder Garcés, es el presidente de Manuelita.

El propio Eder Caicedo fue alcalde de Cali designado por Virgilio Barco en 1987 (estuvo en el cargo hasta 1988), y actualmente es representante de Juan Manuel Santos en el consejo de la CVC, la CAR del Valle del Cauca,.

Además, en 2010 Eder le aportó dos millones de pesos a la campaña presidencial de Juan Manuel Santos y en 2006 le había donado 10 millones a la reelección de Álvaro Uribe vélez.